Si bien las gafas y los lentes de contacto son opciones comunes para corregir la miopía, hay tratamientos disponibles que pueden ayudar a controlar su progresión y prevenir complicaciones graves a largo plazo.
¿Por qué es importante controlar la miopía en niños y adolescentes?
Controlar la progresión de la miopía en niños y adolescentes puede tener varios beneficios importantes:
- Prevención de complicaciones: La miopía alta se asocia con un mayor riesgo de complicaciones graves, como el desprendimiento de retina, las cataratas y el glaucoma. Controlar la miopía puede ayudar a prevenir estas complicaciones.
- Mejora de la calidad de vida: Reducir la dependencia de las gafas y los lentes de contacto puede mejorar la calidad de vida de los niños y adolescentes al permitirles participar más plenamente en actividades al aire libre y deportes.
- Mayor comodidad: Los niños y adolescentes que controlan la progresión de su miopía pueden disfrutar de una mayor comodidad visual sin la necesidad constante de cambiar sus gafas o lentes de contacto.
¿Que tratamienos existen para el control de miopía?
- Lentes oftámicas específicas para el control de miopía.
- Lentes de contacto blandas específicas para el control de miopía: pueden ser de reemplazo diario o mensual
- Tratamiento Orto-k (lentes de contacto nocturnas): Este tratamiento implica el uso de lentes de contacto especialmente diseñados que se usan durante la noche para corregir la forma de la córnea y reducir la miopía.
- Gotas para los ojos: pueden ayudar a ralentizar la progresión de la miopía en algunos niños. Sin embargo, no todas las gotas para los ojos son adecuadas para todos los niños, y es importante consultar a un especialista en salud ocular antes de usarlas.
Cada uno de estos tratamientos tiene sus propias ventajas y desventajas, y el tratamiento más adecuado para su hijo dependerá de varios factores, incluida la gravedad de su miopía y su edad. Es importante consultar a un optometrista para determinar el mejor plan de tratamiento para su hijo.
IMPORTANTE
La miopía tiene una fuerte base genética. Si uno o ambos padres son miopes, hay una mayor probabilidad de que sus hijos desarrollen miopía. Por esta razón, si usted o su pareja tienen miopía, es especialmente importante monitorear y controlar la miopía de sus hijos para prevenir complicaciones a largo plazo.
En resumen, controlar la miopía en niños y adolescentes puede tener importantes beneficios para su salud ocular y calidad de vida.